Curiosidades de lengua y literatura: ¿Cómo es posible que aún exista la hambruna?

jueves, 28 de julio de 2011

¿Cómo es posible que aún exista la hambruna?

En el mejor de los casos, el paro nos acecha. Se “recorta” en todo (o casi, excepto en políticos inútiles), especialmente en lo básico: sanidad, educación… suben las facturas, los impuestos… Y siempre lo pagamos los mismos. Sin embargo, estos últimos días, en lugar de angustiarme pensando en qué será de mí, me he sentido afortunada y ha venido a mi memoria la fábula de Samaniego que aprendí de pequeña y que dice algo así:

Cuentan de un sabio que un día,

tan pobre y mísero estaba,

que solo se sustentaba,

de unas hierbas que comía

¿Habrá otro, entre sí decía

más pobre y mísero que yo?

y cuando el rostro volvió,

halló la respuesta viendo

que iba otro sabio cogiendo

las hojas que el arrojó.

Y es que hay millones de personas que mueren de hambre. Sí, en pleno siglo XXI. Dos millones y medio de somalíes se han visto obligados a dejar sus hogares huyendo del hambre. Once millones de personas están amenazadas por la sequía en el Cuerno de África.

Fuente: El País

En 1992 otra hambruna se cobró la vida de 300.000 somalíes. En Biafra, en 1984, murieron un millón de personas.

Solo organizaciones como Cruz Roja Internacional, Médicos sin Fronteras y Acción contra el Hambre trabajan en esa parte de Somalia, pero no pueden ayudar debidamente a las víctimas, debido a la prohibición expresa de los radicales islamistas (un enemigo muy temido por todos los países).

Me pregunto cómo es posible que actualmente exista la hambruna, cómo podemos permitirlo, cómo podemos permitir tanta desigualdad y un reparto de la riqueza que favorece que las personas mueran de inanición, que carezcan de lo más básico, mientras otra parte de mundo malgasta en la opulencia.

Aún en los momentos de crisis que vivimos podemos ayudar, cada uno según sus circunstancias. En El País he encontrado unos números de cuenta donde poder hacer una aportación, los he copiado: